En algunas partes del mundo, los restaurantes comienzan a reabrir sus puertas tras meses de cierre por el coronavirus, aunque bajo estrictas normas de distanciamiento social. Uno de ellos, en París (Francia), sentó enormes osos de peluche en sus mesas para limitar la cantidad de personas. La tierna y divertida iniciativa se volvió viral en las redes sociales.
Sin duda, los establecimientos de comida han tenido que idear soluciones creativas para volver a la atención al tiempo que evitan las aglomeraciones de personas. La nueva normalidad implica la desaparición de los salones repletos. La idea puesta en marcha por este restaurante para recordarle esta realidad a la gente se llevó los aplausos de los internautas.
La imagen muestra el ambiente en uno de los famosos restaurantes de la capital francesa, con sus mesas al aire libre ubicadas de tres en tres y ocupadas parcial o totalmente por osos de juguete tan grandes como una persona, de manera tal que se garantiza la presencia de dos personas como máximo en una misma mesa.
Los comentarios divertidos no se hicieron esperar. Algunos ironizaron: “¿Por qué los osos no llevan mascarilla?”, “Los osos de peluche son malos para dar propina”. Otros expresaron sus felicitaciones: “¡Los franceses son tan fabulosos!”
Sin duda, esta graciosa solución fue muy comentada en redes sociales como Twitter, donde se volvió viral en cuestión de minutos.
Fuente: LA REPÚBLICA