Después de más de siete meses de inactividad por la pandemia del Covid-19, el complejo arqueológico Tiwanaku abrió sus puertas el pasado domingo, entre medidas de bioseguridad, decenas de visitantes y priorizando siempre la vida.
“Son alrededor de 10 protocolos que se han presentado al Comité de Emergencia Municipal (COEM) conforme a decreto supremo y en este caso el COEM nos ha autorizado el programa de reapertura”, explicó Julio Condori, director general ejecutivo del Centro de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas y Administración de Tiwanaku (Ciaaat).
De acuerdo con el programa presentado por el Ciaaat al municipio, el sitio patrimonial realizará una reapertura en tres fases.
Primera fase:
Consiste en permitir el ingreso del público a las áreas al aire libre bajo estrictas medidas de bioseguridad. Esto incluye a la Pirámide de Akapana, el Templete Semisubterráneo, el Templo de Kalasasaya, la Puerta del Sol y la Luna, los monolitos Fraile y Ponce y la Pirámide de Pumapunku.
“Nosotros hacemos la desinfección de todos los visitantes que llegan, el control de temperatura y de manera obligatoria, toda persona que llega al sitio arqueológico de Tiwanaku tiene que cumplir las medidas básicas preventivas”, detalló la autoridad edil.
Segunda y tercera fase:
Aún no se tienen fecha concreta para activarse, son la reapertura de los museos y la habilitación de visitas nocturnas.
“En el marco de las políticas nacionales, una vez que se levanten las restricciones, estaremos abriendo lo que son los museos Cerámico y Lítico, los cuales ahora están cerrados por una cuestión de seguridad y priorizando siempre la vida”, remarcó el director.
Detallar que en los primeros dos días de actividad, que coincidieron con el feriado de Todos Santos, el centro arqueológico recibió cerca de 100 visitantes, se espera que a medida que se extienda la información sobre la apertura aumente el número de visitantes y se revierta un poco la situación actual que hasta el momento supuso la pérdida del 90% de la recaudación anual.
Requisitos para los visitantes:
-Uso obligatorio de barbijos
-Distanciamiento social de un mínimo de 1,5 metros
-El cumplimiento del uso de desinfectantes durante la visita
-Respeto de la ruta única y las señalizaciones.
En el caso de turistas extranjeros y guías, se solicitará, además, una fotocopia del resultado negativo PCR del Covid-19, a la vez que se controlará que los grupos no superen los siete integrantes y que ingresen en intervalos de cinco minutos.