Este año Estados Unidos aumentó sus inversiones en nuevas tecnologías además de dispositivos de seguridad para el ejército norteamericano.
Recientemente integró un grupo de perros robots a su base militar además que la milicia de Estados Unidos se encuentra trabajando en una nueva tecnología de lectura de mente para facilitar las cosas en el campo de batalla.
La Oficina de Investigación del Ejército de EE.UU (ARO) destinó más de seis millones de dólares a un proyecto de neurociencia con el objetivo de comprender las señales cerebrales.
En un reciente descubrimiento en su estudio se dio el primer paso para que los soldados se comuniquen telepáticamente en el futuro.
Los científicos encargados del proyecto de (ARO) publicaron los resultados en la revista Nature que son bastante prometedores en la decodificación de las señales cerebrales.
Según los investigadores lograron identificar y clasificar las señales de salida de nuestro cerebro, separándolas de las señales que dirigen el comportamiento.
Hamid Krim, Gerente del programa ARO: “Aquí no solo estamos midiendo señales, sino que las estamos interpretando. Sin embargo, puedes leer lo que quieras, pero no significa que lo entiendas”
El estudio emplea un algoritmo de identificación preferencial del subespacio (PSID), el cual es capaz de modelar la actividad neuronal mientras separa y prioriza las señales relevantes.
Esto debido a la comprensión de cómo la dinámica neuronal explica comportamientos específicos que requiere disociar dinámicas conductuales relevantes e irrelevantes.
Krim indicó que las señales de estrés y fatiga que emite el cerebro antes de que alguien se dé cuenta de que está estresado o cansado es lo que le permite a las tropas saber cuándo deben tomar un descanso; el único límite a las posibilidades es la imaginación.
La comunicación silenciosa es otro potencial según Krim aseguró que los investigadores podrían aprovechar la investigación para permitir que el cerebro y las computadoras se comuniquen para que los soldados puedan hablar en silencio a través de una computadora en el campo.
“En un teatro, puedes tener a dos personas hablando entre sin susurrar una palabra”, aseveró Krim. “Así que tú y yo estamos en el teatro y tenemos que hablar sobre algo a lo que nos enfrentamos. Básicamente hablé con mi computadora, su computadora puede estar en su bolsillo, puede ser su teléfono móvil o lo que sea, y esa computadora habla con la computadora de su compañero de equipo. Y luego su computadora hablará con tu compañero de equipo”, explicación ejemplificada de Krim.
Pero aún queda mucho por hacer, ya que probablemente falten décadas para cualquier tipo de interfaz máquina-humano; lista para la batalla que utilice señales cerebrales recalcó Krim. Hasta el momento, la tecnología de lectura de mentes no es una realidad manejada por el ejército de Estados Unidos.
Sin embargo, este nuevo paso determina un futuro de la compresión, identificación y traducción de toda nuestra actividad cerebral.
