En Estados Unidos, Texas fue declarada zona catastrófica para ayudar a los ciudadanos a afrontar los cortes de luz y la escasez de agua, debido a la intensa tormenta de nieve que cayó hace unos días. El intenso frio del Ártico cobró la vida de 60 personas.
Este estado fue el más golpeado de EE.UU, pues familias deben hacer largas filas para conseguir agua potable, los alimentos escasean en los centros de abastecimiento y aunque la mayoría de los habitantes ya tiene electricidad, los precios de este servicio y el del gas natural aumentaron radicalmente.
Por otra parte, el Departamento de Servicios de Salud de Texas afirmó que el clima inestable provocó la suspensión temporal de 730 mil dosis de vacunas contra el coronavirus.