Se encontró en el desierto de Judea en el sur de este país, según dicen los expertos se trata de un testamento escrito en griego perteneciente al versículo de Zacarías y Nahún según dicen fuentes de la autoridad de antigüedades de Israel (I.I.A) estos manuscritos se buscaron durante más de 60 años y se trata de uno de los hallazgos más importantes de los últimos tiempos.
La IIA se encarga de que no haya en Israel ladrones de en los museos y a la vez es la entidad que se encarga de invertir si es necesario en proyectos de arqueología que tenga que ver con temas religiosos y de cualquier índole.
Entre los últimos y más importantes hallazgos de la ciencia y la arqueología en cuanto a religión había sido cuando un científico del reino unido había supuestamente encontrado la casa donde Jesús vivía cuando era pequeño, aunque todavía están tratando de esclarecer.
Además del manuscrito bíblico también se encontraron artefactos pertenecientes a la rebelión de judea contra los romanos entre el año 132 y 136. Entre ellos se encontró el esqueleto de un niño de 6 mil años de antigüedad y una cesta de más de 10.500 años.
Poniendo un poco en contexto las relaciones estaban tensas en aquella época entre romanos y judíos por diferencias religiosas y por gran cantidad de milicia romana y un cambio significativo de la economía de este país. Esta guerra fue comandada por Bar Kokhb.