El país de India está atravesando uno de los momentos más difíciles de la pandemia, las alarmantes cifras diarias de 295.041 infectados y el colapso en las clínicas de salud complica todo. En las últimas 24 horas, han muerto más de 2.023 personas.
“Esta vez, la infección se está propagando tan rápido que las personas no tienen tiempo para obtener medicamentos. Mucha gente está muriendo antes de que podamos obtener un informe de prueba” expresó el doctor SK Pandey.
A la nueva ola que que afronta ese país, indica que la responsable de la elevación de casos repentinos es, por una extraña variante, denominada “doble mutante”. Según el Centro Nacional para el Control de Enfermedades (NCDC), el temor se encuentra en que las vacunas se han diseñado para crear anticuerpos que se dirigen específicamente a la proteína de pico del virus. Sin embargo, la nueva variante, podría cambiar la forma de la proteína de pico, como resultado los anticuerpos no podrían neutralizar el virus de manera efectiva.
Según la prensa local, la producción de medicamentos esenciales contra el coronavirus se ha desacelerado e incluso suspendido en algunas fábricas y se han retrasado las solicitudes para las fábricas de producción de oxígeno.
“La situación era manejable hasta hace unas semanas. La segunda ola de infecciones ha llegado como una tormenta “informó El primer ministro indio, Narendra Mod, en una conferencia de prensa local.
Por otro lado, en la morgue del hospital Lok Nayak, se están amontonando los cadáveres de manera alarmante y de la misma forma el crematorio de Nigambodh Ghat, ha comenzado a construir hogueras funerarias tradicionales porque sus hornos se encuentran colapsados.
Las autoridades confían en el proceso de vacunación y la ventaja de un alto porcentaje de población joven que mantiene una baja mortalidad.
