Los virus de tipo “ransomware”, capaces de cifrar y robar información. Se han convertido en uno de los negocios más lucrativos para el cibercrimen.
Las ganancias que generan para aquellos grupos que los emplean cada vez son más grandes. También por los rescates millonarios que piden. Así lo demuestra el que, de acuerdo con un reciente informe de la firma Chainalasys, en 2020 se haya registrado un incremento en los rescates de más del 300% con respecto al año anterior.
En lo que va del año, los ciberdelincuentes consiguieron embolsarse más de 350 millones de euros. Mientras que en 2019 esa cifra no alcanzó los 100 millones.