Las ondas gravitacionales se pueden investigar de forma más accesible si son grabadas, para así poder escuchar la “música” que emiten y proceder con su identificación. Estas conclusiones son producto de un trabajo conjunto entre Científicos de Scientific Collaboration, Virgo Collabolation y Centro de Astrofísica Gravitacional de la Universidad Nacional de Australia.
Estas ondas son perturbaciones del espacio-tiempo que son producidas por masas en movimiento. Hasta la fecha, solo se logró su identificación a partir de explosiones generadas por colisión de estrellas de neutrones y agujeros negros, entre otros eventos cósmicos.
No obstante, en este nuevo estudio se descubrió que los zumbidos que producen las oscilaciones facilitan su detección. Ahora, el reto se traslada a la captación de esta “música” proveniente de las ondas para simplificar los objetivos científicos planteados.