México renovará este domingo su cámara de diputados y unos 20.000 cargos locales, en una elección marcada por los estragos de la pandemia y la violencia, que pondrá a prueba al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Aun así, con 228.146 muertes, México es la cuarta nación más castigada por la pandemia en números absolutos y la decimonovena en relación a sus cifras cada 100.000 habitantes.
López Obrador, que atribuye la violencia a una estrategia del crimen organizado para ampliar su poder, sostiene que la seguridad de la jornada está garantizada.
La economía mexicana, segunda mayor de Latinoamérica, se desplomó 8,5% en 2020 arrastrada por la pandemia, pero el gobierno espera un rebote de 6,5% este año.
Los seguidores de AMLO decepcionados «no tienen a donde ir, te quedas ahí por inercia», opina Carlos Bravo Regidor, del Centro de Investigación y Docencia Económicas.
Con todo, el movimiento se mantiene lejos de los escándalos de dinero sucio y trapacerías que caracterizaron a otros partidos, permitiendo a AMLO mantener la lucha anticorrupción como principal bandera.
Los comicios se realizarán tras una campaña sangrienta que se salda con 89 políticos asesinados desde septiembre pasado. De ellos, 35 eran candidatos, según la consultora Etellekt.
