Policía Boliviana y Migración en Rurrenabaque, Beni, detuvieron el martes a 35 extranjeros que se dirigían a La Paz, entre estas personas se encontraban ciudadanos ghaneses, sudafricanos y haitianos.
Estos migrantes, que habían ingresado a Bolivia desde la frontera brasileña, estaban siendo trasladados ilegalmente en un bus que tenía como destino a la sede de Gobierno. Cabe recalcar que en el grupo se encontraron a nueve menores.
“El juez ha determinado una fianza de 6.000 bolivianos a cada uno de los conductores, además deben presentarse ante la Fiscalía cada 15 días, no pueden salir del país y tampoco pueden tener contacto con las víctimas”, indicó Alberto Condori, representante de la Defensoría del Pueblo.