Actualmente, en el mundo existen 7 especies de delfines de agua dulce, cuatro de ellas habitan en Asia y tres en Sudamérica.
Según el Fondo Mundial para la Naturaleza, WWF por su nombre en inglés World Wildlife Fund, las cuencas Orinoco y Amazonas contienen el mayor reservorio de estas especies.
Sin embargo, se encuentran amenazadas por las malas prácticas pesqueras, deforestación, contaminación de aguas y fragmentación de lugares en el que viven.
Los delfines de río son las especies de mamíferos acuáticos más amenazadas del mundo.
Otras de las amenazas a las que estos mamíferos acuáticos se enfrentan son las hidroeléctricas y la minería ilegal.
Delfines de Río de Suramérica hizo un primer monitoreo satelital de delfines en Bolivia, Brasil, Colombia y Perú y encontraron a delfines llenos de mercurio, sin alimentación por la mortandad de peces, su principal insumo.
La Iniciativa de Delfines de Río Suramérica (SARDI) está conformada por las organizaciones FAUNAGUA, Fundación Omacha, Prodelphinus, Mamirauá y WWF.
Este grupo promueve la conservación del delfín de agua dulce y tiene como objetivo acceder a información científica de estas especies, de sus hábitats alimentación, impacto de amenazas, entre otros.
El 18 de septiembre de 2013, se promulgó una Ley que declara al delfín de río o bufeo boliviano como Patrimonio Natural del País.
Estudios genéticos demostraron que el delfín de río boliviano es una especie única, diferente de los demás delfines de río y de su pariente más cercano, el boto que vive en Brasil, Perú, Colombia, Ecuador, Venezuela, Surinam y Guyana.