Jiuzhang 2.0, desarrollada por científicos chinos, es septillones de veces más rápida que las supercomputadoras más poderosas del mundo, resuelve en un milisegundo lo que tomaría 30 billones de años en el sistema más potente.
Con esta computadora se detectaron 113 fotones, lo que marca un paso importante para acelerar el desarrollo de esta nueva tecnología de la computación, al usar estas partículas de luz como portadores de información. Con solo uno de ellos pueden operar más rápido que las computadoras clásicas más avanzadas.
“En comparación con la primera Jiuzhang, hemos mejorado mucho el rendimiento y la eficiencia de la recoleción de fuentes de luz cuántica. Así, aumentamos el número de fotones detectados y demostramos la programabilidad de la computación cuántica basada en el muestro de bosones Gaussianos”, explica Lu Chaoyang, uno de los científicos en el proyecto.
La capacidad de supercomputación de Jiuzhang 2.0 tiene potencial de aplicación en áreas como la teoría de grafos, el aprendizaje automático y la química cuántica, según el equipo.
