Ariel Basteiro y Elías Chévez, embajadores de Argentina y Nicaragua respectivamente son acusados por injerencia política.
Basteiro indicó en la marcha “siempre es bueno estar en calle, ganar la calle, salir a defender al pueblo estando en la calle”; a su vez Chévez señaló: ““El presidente Arce no está solo, por eso esta marcha en la que estamos caminando junto a ustedes”.
Autoridades y representantes nacionales e internacionales tienen sus posiciones. En el interior Rubén Gutiérrez, senador del MAS niega que haya injerencia política, indica que la libertad de acción, locomoción y expresión “que tienen personalidades en el ámbito diplomático que están radicados aquí en Bolivia es absolutamente en ese marco”.
Alejandro Reyes de Comunidad Ciudadana expresó que hay injerencia y eso demuestra la doble moral del Ejecutivo. “Ellos deben explicar cuándo es injerencia y cuándo es cooperación y es una pena que no lo sepan explicar”, señaló.
En Argentina, la oposición cuestiono las acciones de Basteiro. Gerardo Milman indicó que el caso será tratado en el Congreso de su país. “Que Basteiro marche en una marcha política está prohibido por los tratados internacionales, de los cuales Argentina es suscrita como la Convención de Venecia. (…) Su acto de injerencia merece nuestro total repudio”.