Tras 16 años en el poder, la canciller alemana decidió no postular a un nuevo mandato y será sucedida por un gobierno de coalición liderado por el socialdemócrata Olaf Scholz.
Angela Merkel, canciller alemana, fue quien dominó la política alemana y europea en los últimos años, llegó a su fin. Merkel dejará el cargo de canciller de Alemania la semana que viene y el pasado jueves 2 de diciembre participó en una ceremonia militar en su honor, para lo que ella misma eligió la música.
Merkel aseguró que sus cuatro mandatos (de cuatro años cada uno) fueron “años llenos de acontecimientos y, a menudo, muy desafiantes”. Después de casi dos años de pandemia, la aún canciller no pudo evitar referirse a las noticias falsas que complican la lucha contra el coronavirus, y a las teorías de la conspiración.
“Los dos últimos años de pandemia, en particular, han mostrado, como una lupa, la gran importancia de la confianza en la política, la ciencia y el discurso social, y también lo frágil que es todo eso”, apuntó Merkel.
En la velada hubo una procesión con antorchas. Pero lo que más llamó la atención de los alemanes fue la música que Merkel eligió. La canciller es una apasionada de la música, “principalmente música clásica”, según dice ella, y es una asistente habitual al Festival de Bayreuth, dedicado al compositor alemán Richard Wagner.
La elección impresionó ampliamente a los alemanes, que la vieron como una prueba del sentido del humor subestimado de Angela Merkel y como un guiño a su juventud en Alemania del Este.