Rodney Miranda, Secretario Municipal de Culturas y Turismo, informó que las diferentes restricciones fueron aprobadas por la Secretaría Municipal de Salud. Protocolo que está dirigida para bailarines, espectadores y comerciantes, con el objetivo de prevenir y velar por la salud de la población.
Distanciamiento físico de un metro, restricción en el consumo de bebidas alcohólicas durante el recorrido y uso constante del barbijo, son parte de las más de 20 exigencias que se aplicarán en la entrada del Jisk’a Anata y el Domingo de Tentación.
Entre las primeras indica que los menores de 18 años no pueden participar en la entrada del Jisk’a Anata del lunes 28 de febrero. Los bailarines deben portar el carnet de vacunación contra el Covid-19 a la vista, será controlado a través del escaneo del código QR.
Señala que para los espectadores se dispuso el uso de las medidas de bioseguridad, está prohibido el manejo de espumas, serpentina en aerosol, entre otros, porque se considera como un canal de contagio de coronavirus.