Este martes (22/Mar) se tuvo un caso de envenenamiento grupal en Vallegrande, Santa Cruz. Se trata de una mujer que hizo beber un fármaco a sus tres hijos menores de edad y luego ella ingirió, esto con el propósito de acabar con sus vidas.
Una familiar que pasó por el domicilio los encontró en riesgo de muerte, por lo que pidió auxilio a la Policía Boliviana y fueron conducidos al Hospital Señor de Malta. Rodrigo García, Director de la Clínica, comunicó que estabilizaron a la madre y a una menor de seis años, mientras que un niño de siete años y un bebé de seis meses fueron trasladados al Hospital de Niños.
Según un examen toxicológico, se presume que la madre habría utilizado sedantes y calmantes. También se conoce que la familia fue abandonada por el padre y ante esa situación que atravesaban la madre optó por acabar con sus vidas.