10 mil migrantes de varios países de América Latina y el Caribe se concentraron en la localidad mexicana chiapaneca de Tapachula para organizarse y salir hacia los Estados Unidos. Los migrantes convocaron a los participantes de ese movimiento a quedarse a dormir en ese espacio público para salir todos juntos.
El argumento de su salida es que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados está dando las citas hasta agosto y ven lentitud burocrática en el Instituto Nacional de Migración (INM). Luis García Villagrán, activista que ayuda en las caravanas, denunció que agentes de la entidad irrumpieron en hoteles y casas en busca de migrantes.
De acuerdo con García, llevan más de 10 días esperando que las autoridades migratorias resuelvan su situación, pero no hubo respuestas positivas. Esta es la 8va caravana que sale de México rumbo a Estados Unidos.