Jair Bolsonaro, Presidente brasileño, ofreció este martes (20/Sep) en la Asamblea General de la ONU “abrir sus puertas” a los religiosos católicos que “sufren persecución” por el régimen “dictatorial” del nicaragüense de Daniel Ortega. Asimismo, pidió “un alto el fuego inmediato” en Ucrania y abogó por que se mantengan los “canales de diálogo”.
Brasil, que tradicionalmente es el primer país en hablar en la apertura de la Asamblea General que dio inicio en Nueva York, “repudia la persecución religiosa en cualquier lugar del mundo”. Tras pedir una reforma del sistema de la ONU, Bolsonaro expresó que el “80% de la Amazonía sigue intocada” pese a las noticias de la prensa internacional en sentido contrario.
“Brasil abre sus puertas para acoger a los padres y monjas católicos que han sufrido persecución del régimen dictatorial de Nicaragua. Me declaro defensor incondicional de la libertad de expresión y del derecho religioso de mi país”, aseguró Bolsonaro.