Aduana Nacional interceptó nueve vehículos que pretendían introducir 205 toneladas de cerveza, harina, maíz, soya, aceite y artículos de aseo de contrabando provenientes de Argentina y Brasil. José Luis Mollinedo, Gerente Regional, informó que toda esta mercancía fue valorada en más de un millón de bolivianos y tenían como destino final la ciudad de Santa Cruz.
Las intervenciones se realizaron durante los primeros 15 días del mes de octubre y tras una minuciosa inspección se observó que los dos buses de transporte público no llevaban pasajeros, sino cajas de aceite escondidos hasta por debajo de los asientos. Los nueve vehículos fueron interceptados por técnicos de la Unidad de Control Operativo Estratégico (UCOE).
“En el caso de las flotas hay un nuevo modus operandi, hay clanes familiares que simulan ser pasajeros; sin embargo, son los dueños del camión y de la mercancía. Además, acondicionan los vehículos con compartimientos secretos para intentar burlar el control de Aduana”, recalcó Mollinedo.