Este pasado 6 de febrero, al menos 26 personas han muerto como consecuencia de la ola de incendios que afecta a zonas del centro y el sur de Chile, tras incendiarse unas 280.000 hectáreas.
De acuerdo al balance divulgado por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), de los fallecidos 18 responden a la región de Biobío, aunque también se han registrado siete víctimas en la Araucanía y una en Ñuble.
Asimismo, las autoridades han prometido que perseguirán a aquellas personas responsables directa o indirectamente de los incendios y hasta ascienden a doce los detenidos.
Chile acumula unos 280 incendios en todo el país, aunque la SENAPRED cataloga 69 de ellos como “en combate”, reconociendo así que avanzan sin control.
Cientos de efectivos trabajan en las tareas de extinción, en las que colaboran también países tanto de América Latina como de fuera de la región que han comprometido en las últimas horas equipos y personal.