Este 16 de mayo, se informó que las búsquedas en internet, dominadas por Google en los últimos 25 años, se han vuelto tan cotidianas como las llamadas telefónicas, pero la ola actual de la inteligencia artificial (IA) generativa podría transformarse.
Stefan Sigg, director de productos de Software AG, con sede en Alemania, manifestó: “La gente se está dando cuenta de cuánto usa Google no para encontrar una página web, sino para responder una pregunta”.
Microsoft, considerado durante mucho tiempo el tío aburrido de las grandes empresas de tecnología, abrazó sin miedo la idea de integrar un robot conversacional (inspirado en el ChatGPT) a Bing, su motor de búsqueda.
Asimismo, el nuevo Bing, que se lanzó en todo el mundo después de tres meses de pruebas, responde directamente a una consulta en lugar de arrojar una página llena de enlaces para que el usuario navegue y haga clic.
Con una directiva, Bing puede elaborar tablas comparativas entre dos productos, proponer un calendario de actividades, redactar una evaluación o ayudar a preparar una entrevista de trabajo, por ejemplo.
Google y Microsoft también han comenzado a agregar herramientas de inteligencia artificial generativa a sus diversos servicios, desde la nube hasta el procesamiento de textos.