Néstor Lorenzo, técnico de la selección colombiana, comienza a planificar la próxima visita a Bolivia, donde los cafetaleros enfrentarán al subcampeón de América en el estadio Municipal de Villa Ingenio, en El Alto, a 4.100 metros sobre el nivel del mar. Consciente del reto físico y táctico que representa jugar en la altura, Lorenzo aseguró que el equipo buscará “neutralizar” esas dificultades mediante el juego.
“Es muy difícil jugar a 4.100 metros de altitud. Son sedes complicadas desde lo físico hasta el comportamiento del balón, pero trataremos de superar esa dificultad a través de nuestro estilo de juego”, afirmó el estratega argentino después del partido contra Argentina.
Richard Ríos, mediocampista de la selección y jugador del Palmeiras, también reconoció la complejidad de jugar en la altura boliviana, tras su experiencia en La Paz durante la Copa Libertadores. “Será complicado, pero todo es partido a partido. Tendremos tiempo para prepararnos adecuadamente para Bolivia”, comentó Ríos.
El enfrentamiento está programado para el 10 de octubre, cuando Colombia buscará sumar puntos en uno de los escenarios más exigentes del continente.