Evo Morales, ex Presidente presentó un documental en el que denuncia una supuesta operación militar y policial dirigida a atentar contra su vida. Durante una conferencia de prensa con medios internacionales, realizada por teleconferencia, Morales aseguró que la prensa boliviana lo considera su “enemigo número uno” y sugirió la influencia gubernamental en la cobertura mediática.
“¿Por qué invitamos a la prensa internacional? Porque aquí la prensa nacional actúa como enemiga. Los periodistas honestos saben que, si dicen la verdad, pierden la publicidad estatal”, expresó Morales.
El documental incluye imágenes de cámaras ubicadas en el Chapare y sugiere la participación de la DEA en el supuesto complot. Morales, quien enfrenta constantes críticas, reiteró sus acusaciones contra medios de comunicación, señalando que “antes era la derecha y el imperio; ahora son el imperio, el gobierno y los medios”.
La relación entre el expresidente y la prensa ha sido tensa desde hace años. La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó en 2018 sus intentos de restringir la libertad de expresión, incluyendo su apoyo a una ley contra la mentira. Recientemente, periodistas han denunciado agresiones verbales y físicas durante protestas lideradas por Morales y sus seguidores.