Autoridades de Salud de Japón mostraron su preocupación por una variante distinta de coronavirus encontrada en el país a finales de febrero en un viajero proveniente de Filipinas. Sugirieron cambios en las restricciones de viaje y control fronterizo.
Esta mutación fue detectada en un hombre de 60 años que arribó al aeropuerto de Narita, cerca de Tokio el pasado 25 de febrero y no presentaba síntomas de la enfermedad, esta mutación se diferencia de las descubiertas en Reino Unido, Sudáfrica y Brasil.
Según el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas del país Nipón, hasta el momento, se detectaron 34 casos con la nueva variante en la parte central de Filipinas desde finales de enero.
Se cree que la variante filipina presenta un nivel similar de amenaza que las cepas sudafricana y brasileña. Así mismo, existe la posibilidad de que sea más resistente a los anticuerpos, incluidos los obtenidos mediante la vacunación.
Con el objetivo de frenar la propagación de esas variantes, Japón -que acumula hasta la fecha más de 445.600 contagios de coronavirus y 8.522 fallecimientos- mantiene sus fronteras cerradas desde finales de diciembre salvo para el regreso de ciudadanos nipones o de extranjeros residentes en el país asiático.