Este miércoles, el agresor imploró al juez que no lo envíen a Palmasola. Ahí está detenido el papá de la joven víctima de los vejámenes.
El hombre de 34 años y fue sentenciado a 25 años de prisión. La víctima es una adolescente que vivió atemorizada por las amenazas de su agresor. A través de una entrevista psicológica contó lo ocurrido. Tras conocer el hecho los agentes de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) detuvieron al sujeto.
La Fiscalía al demostrar que se contaba con todas las pruebas de lo sucedido, consiguió que el detenido acepté su culpa. Sin embargo, al finalizar este procedimiento abreviado el sentenciado imploró al juzgador no cumplir su condena en el penal de Palmasola. Todo porque el padre de su víctima está recluido allí y enterarse de los ataques sexuales sufridos por su hija, le hizo saber al condenado que lo esperaría en el penal para vengarse por lo sucedido.
El juzgador al evidenciar que podía correr riesgo la vida del abusador, aceptó su pedido y ordenó que cumpla su condena en la cárcel de San Pedro, en La Paz.