La crisis institucional en el club San José se agudiza. Al menos 10 jugadores que vistieron la casaca del cuadro orureño en 2020 dejan la institución con rumbo a otros equipos; y ante las bajas tiene el serio inconveniente de no poder incorporar nuevos futbolistas por la sanción de FIFA que pesa en sus hombros.
Cámara de Resolución de Disputas de la FIFA notificó a San José que se le impuso una sanción por la que no se le permite inscribir nuevos jugadores por tres períodos completos y consecutivos, debido al incumplimiento de deudas.
El arquero Roberto Rivas emigró a Nacional Potosí. Tres de sus defensores dejaron el equipo de la V azul: Luis Torrico se marchó a también a Nacional, Iván Vidaurre y Leonardo Toco ficharon por Palmaflor.
Los mediocampistas Roly Sejas, Marcelo Gomes y Luis Serrano también dejaron el club. El primero se fue a Aurora, Gomes recala en el benjamín Independiente Petrolero y el tercero jugará en Palmaflor.
En cuanto a los atacantes hay un trío que no va más. Freddy Abastoflor con destino a Palmaflor, mientras que Rodrigo Vargas y Marquinho anunciaron que se alejan pero aún no han arreglado con ninguna entidad.
El nuevo directorio a la cabeza de David Rivero se ha topado con más problemas, le llueven demandas y las deudas superan los $us 5.000.000.
Precisa conseguir dinero con urgencia para evitar perder más puntos por otros procesos con jugadores y entrenadores y la pérdida de categoría.