Aida Luz Careaga Durán, profesora de una Unidad Educativa San Gerardo ubicada en el departamento de Potosí, dicta sus clases de manera presencial para sus estudiantes y ante el problema de la pandemia ella decidió mandar a construir cubículos para poder disminuir el contacto en el aula.
“Cuando uno ama su profesión, puede hacer miles de cosas”, expresó la profesora Aida Careaga, quien destino un porcentaje de su salario para adquirir las medidas de bioseguridad para que en el momento de dar clases a sus estudiantes.
Duran, señalo que lo que más le importa es poder enseñar a su niños ya que ellos puedan aprender la materia de Valores y Religión, pues el cariño de la maestra se plasma en los detalles que realiza para sus alumnos de Tupiza.
“Son cubículos hechos de madera. Los hicimos agarrar con soportes a los bancos. El vidrio cuesta caro, entonces los he puesto con plástico (…) No puedo decir cuánto me ha costado porque eso es parte de mi cariño”, asevero.