Justicia chilena indemnizará con $us 55.000 a cada uno de 31 mineros de Atacama que sobrevivieron milagrosamente durante 69 días en una mina el 5 agosto de 2010, fecha en la que un derrumbe bloqueó el acceso al yacimiento y quedaron atrapados a 600 metros de profundidad.
Corte de Apelaciones de Santiago adoptó esta decisión responsabilizando a los órganos del Estado por el hecho, pues aseguró no cumplieron sus obligaciones legales y actuaron de manera “negligente”, causando que estos trabajadores quedaran enterrados vivos.
La sentencia señala al Servicio Nacional de Geología y Minas (Sernageomin) como el principal culpable del suceso, dado que este órgano estatal faltó a su obligación de “velar por el cumplimiento de medidas de seguridad”.