Delfines, focas y tortugas, mueren por alimentarse de plástico, y quedarse atorados en estos residuos cuando son pequeños, provocando daños en su cuerpo al crecer. Estos animales marinos no tienen la capacidad para distinguir entre una bolsa de plástico y su alimento.
El plástico representó una invención muy práctica para los humanos, pero provocó mucho daño al medio ambiente con el consumo abusivo y la falta de conciencia ambiental del ser humano, haciendo que los océanos se conviertan un gigantesco basurero.
Ante esta situación, algunos estados de la República Mexicana, es prohibir el uso de plásticos, tanto en los supermercados, como en los restaurantes y hacer campañas donde la gente tome conciencia sobre el uso excesivo del plástico.