Científicos están desconcertados por la identificación de cinco ‘círculos de radio’ en el espacio. Los extraños anillos son 16 veces más grandes que nuestra galaxia y solo se detectan por radiotelescopios.
El radiotelescopio australiano ASKAP identificó por primera vez extraños círculos de radio en 2020 y se convirtieron rápidamente en objetos de fascinación para los astrónomos. Se trata de emisiones de ondas de radio en forma de anillos, con alrededor de un millón de años luz de diámetro. Ahora, un nuevo estudio de la Agencia Científica Nacional Australiana (CSIRO) ha determinado tres teorías principales para explicar qué causa estos círculos de radio impares (ORC, según las siglas en inglés).
Por un lado, una de las hipótesis sostiene que serían el remanente de una gran explosión en el centro de las galaxias anfitrionas, como por ejemplo en el caso de la fusión de dos agujeros negros supermasivos.
Una segunda alternativa indica que se habrían creado a partir de potentes chorros de partículas energéticas, que salen también del centro de las galaxias. Y una tercera posibilidad desarrollada por los científicos muestra que los anillos podrían formarse como resultado de un choque o colisión final en el marco de un estallido estelar, dentro de eventos ligados a la producción de estrellas en las galaxias.