Este pasado 7 de octubre, Angélica Sosa, ex Alcaldesa interina de Santa Cruz, sufrió una descompensación, tras enterarse de la determinación judicial por la que seis bienes de su propiedad fueron embargados por la Justicia, por el caso que enfrenta denominado “Prestín”.
Ante la noticia, la ex Alcaldesa interina cruceña, sufrió una descompensación que derivó en su internación en el hospital San Juan de Dios. Posteriormente, se informó que dio positivo a la prueba de COVID-19, por lo cual se mantiene internada y en observación médica.
Según testigos, el incidente se dio luego de que el juez anticorrupción, Primo Flores, determinara el embargo. Hubo un reclamo airado de Sosa al juez, quien la echó de su oficina, la amenazó con arresto, le impuso una multa y advirtió con elevar un informe a la dirección penitenciaria.
En ese momento, la imputada sufrió la descompensación y fue atendida por su custodia policial, que luego la trasladó al hospital.
“La incautación de mis bienes, patrimonio mío y de mis cuatro hijos. (Fueron) adquiridos en el año 98 y que consta en derechos reales. Esto es una manipulación”, alcanzó a argumentar Sosa antes de ser llevada al centro médico.
“Se ha logrado que el juez ordene incautar los bienes inmuebles y pasen a Dircabi para que se pueda resguardar la reparación del daño realizado a la Alcaldía con los hechos irregulares”, manifestó Felipe Molina, asesor jurídico de la Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra.
Sosa, se encuentra detenida desde el 21 de diciembre del año pasado, y en el caso de los ítems fantasmas recibió una orden de detención por 90 días en abril pasado, que fue modificada el jueves por medidas sustitutivas.
