Este 24 de noviembre, se destacó el destino turístico Rurrenabaque – Madidi – Pampas, que cuenta con una exuberante naturaleza para que los visitantes nacionales y extranjeros disfruten del turismo de aventura en la Amazonía boliviana.
Asimismo, el Gobierno Nacional, a través del Viceministerio de Turismo, dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, impulsa la reactivación económica y promoción de ese destino turístico que tiene diversos sitios para que el visitante viva una experiencia en contacto con la naturaleza.
Eliana Ampuero, viceministra de Turismo, manifestó: “El presidente Luis Arce siempre comprometido con el turismo y es una promesa cumplida que nosotros lleguemos al destino para que se pueda promocionar (…). Queremos que los bolivianos y bolivianas visiten nuestro país, que no se vayan a otro lugar, porque Bolivia tiene inmensidad de maravillas. Arrancamos con toda la fuerza, trabajamos con el sector del turismo e iniciamos esta travesía”.
Según Ampuero, al llegar a Rurrenabaque se encuentra gente acogedora, centros de hospedaje y una deliciosa gastronomía, para luego emprender el recorrido en bote por río para llegar al Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado Madidi y vivir la aventura de caminar por el Cañón del Bala y los senderos.
Sixto Divapuri, guardaparque del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap), explicó que la extensión de esa área asciende a más de 2 millones de hectáreas, tiene desde 180 metros en tierras bajas hasta sus montañas a más de 6.000 metros sobre el nivel del mar, registra al menos 265 especies de animales, 5.015 especies de flora y de las más de 1.000 especies de aves que tiene Bolivia.
Después el turista emprende el viaje de aproximadamente tres horas desde Rurrenabaque hasta Santa Rosa, para continuar con la travesía por el río Yacuma para apreciar las maravillas de la fauna y flora, que es característico de ese lugar del país.
Durante la navegación en bote, el director de Turismo de Santa Rosa describió que el visitante observa de cerca a los lagartos, aves, caimanes, capibaras, monos, tortugas y delfines, entre otras especies.
Además, el turista puede nadar en la laguna Bravo y compartir una divertida jornada con los bufeos, delfines rosados, que son amigables y juguetones con los visitantes, además dar un paseo por un mirador para observar la naturaleza a su alrededor.