El canciller señaló que Bolivia debe pensar desde la geoeconomía y fortalecer su presencia internacional con una gestión moderna y eficiente.
Este martes 11 de noviembre, Fernando Aramayo Carrasco, nuevo ministro de Relaciones Exteriores, fue presentado ante el personal de la Cancillería. En su primera intervención, anunció una reestructuración profunda de la diplomacia boliviana, basada en la geoeconomía y la diplomacia digital, con el fin de fortalecer la presencia internacional del país y vincular la acción política con la proyección comercial.
Aramayo, designado por el presidente Rodrigo Paz Pereira, destacó que asume el cargo con humildad y compromiso, y que se adoptarán medidas inmediatas para modernizar la gestión institucional. La autoridad subrayó que el objetivo del gobierno es construir prosperidad y no administrar crisis, e instó al personal diplomático a trabajar con unidad, responsabilidad y sentido de patria.
El Canciller concluyó afirmando que su misión será dejar una Cancillería más sólida y moderna, capaz de responder a los desafíos globales y de contribuir al desarrollo del país.