Integrantes de una Iglesia Metodista, se concentraron en la represa de Hampaturi, en La Paz. En medio de canticos y con la mirada el cielo, pidieron al cielo lluvias, para que no falte agua en el país, las represas estén llenas y los cultivos no mueran.
Potosí, raciona la distribución del agua; Oruro, se declaró en situación de desastre; mientras que Cochabamba y Chuquisaca, activaron un plan de emergencia departamental; debido a esta situación existe riesgo en la dotación del líquido en las urbes.
El occidente y regiones del valle de Bolivia son golpeados por una sequía que preocupa a las autoridades. Las lluvias se hacen esperar, los animales y cultivos son los más afectados.