Los cuatro tributos derogados representan menos del 1% de los ingresos fiscales, pero se consideran una traba para la actividad económica.
El Gobierno anunció las primeras medidas para estabilizar la economía, que incluyen la eliminación de cuatro impuestos —a las Grandes Fortunas, a las Transferencias Financieras, al Juego y a las Promociones Empresariales— que representan menos del 1% de la recaudación fiscal. La decisión busca mejorar el clima de negocios, frenar la salida de capitales y atraer inversiones.
Además, se planteó una reforma al Presupuesto General del Estado (PGE) que permitirá reducir en al menos 30% el gasto fiscal en 2026, mediante una revisión exhaustiva del gasto corriente.
Asimismo, Gabriel Espinoza, Ministro de Economía, explicó que esta modificación será enviada al Parlamento para definir la ruta fiscal desde el 1 de enero del próximo año.
Entre las acciones inmediatas, el Gobierno acelerará el pago a proveedores —priorizando deudas atrasadas y a pequeños proveedores— y publicará diariamente los montos cancelados para garantizar transparencia. Estas medidas forman parte de un plan integral orientado a recuperar la estabilidad económica, fortalecer las reservas y generar confianza en sectores productivos e inversionistas.

