Más de 5,5 toneladas de alimentos y 136 evacuados marcan la respuesta estatal frente a la tragedia que afectó comunidades cercanas al río Piraí.
Las fuertes inundaciones en Santa Cruz han dejado cientos de damnificados, y el Gobierno activó un operativo de emergencia con más de 15 horas de vuelos de rescate, 136 personas evacuadas y 5,5 toneladas de ayuda humanitaria, según informó Ernesto Justiniano, Viceministro de Defensa Social.
La respuesta involucró coordinación entre los niveles central, departamental y municipal.
Más de 175 efectivos de las Fuerzas Armadas y 100 policías participaron en rescates, incluyendo el de un centro de rehabilitación juvenil destruido por la crecida. Paralelamente, 18 brigadas médicas desplegadas por la Oficina de la Primera Dama realizaron más de 390 atenciones de salud a los afectados.
Justiniano advirtió que el riesgo continúa durante el periodo más intenso de lluvias y que se evalúa el traslado preventivo de comunidades vulnerables. A pesar de limitaciones en equipamiento, el Gobierno aseguró que mantendrá asistencia continua y protección a las poblaciones afectadas.

