Este pasado 7 de diciembre, Luis Arce, Presidente de Bolivia, se manifestó ante los hechos ocurridos en Perú y acusó a la “derecha peruana” de intentar derrocar al gobierno democráticamente electo de Pedro Castillo. Asimismo lamentó lo sucedido y expresó su solidaridad.
“Desde un inicio la derecha peruana intentó derrocar a un gobierno democráticamente electo por el pueblo, por las clases humildes que buscan más inclusión y justicia social. Lamentamos lo ocurrido en la hermana República del #Perú, donde enviamos toda nuestra solidaridad”, manifestó el Mandatario en su cuenta de Twitter.
Además, añadió que constantemente las élites antidemocráticas, hostigan a los gobiernos progresistas, populares y legítimamente constituidos.
Perú, vivió una jornada crítica, primero con las medidas que dictó Castillo como la disolución del Congreso y el Estado de excepción, luego la aprobación de la vacancia del mandatario y finalmente la asunción de la Vicepresidenta Dina Boluarte a la jefatura de Estado.
Por otro lado, la Cancillería boliviana, emitió un breve comunicado, tras la destitución de Pedro Castillo, resaltando su profunda preocupación.
“El Estado Boliviano manifiesta su profunda preocupación por la situación de crisis política que afecta a la hermana República del Perú, y hace un llamamiento a todos los actores políticos a garantizar los principios democráticos, el orden constitucional y el Estado de Derecho”, emite el comunicado.
Castillo no obtuvo el apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional que manifestaron que preservarán el orden constitucional. El exmandatario fue detenido cuando pretendía asilarse con su familia en la embajada de México en Perú.