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La Escuela Militar del Ejército (EMI) anunció que “certificará” la producción del dióxido de cloro de aquellas empresas que deseen elaborar este químico, puesto que el Ejército unos 500 uniformados utilizan el compuesto para prevenir el coronavirus.
“La producción del dióxido de cloro está abierta, porque en estos productos siempre debe haber una triangulación: está la empresa, está la universidad y debe estar el Gobierno. Eso es lo que va permitir realizar una buena investigación y buenos productos. Nosotros como universidad podemos pasar a cualquier empresa o microempresa el conocimiento que tenemos sobre esta producción, indicarles paso a paso cómo se hace, capacitarles y luego la producto que haya generado la certificamos”, afirmó el coronel Iván Omonte.
En el mes de julio, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) no recomendó el uso de productos a base de dióxido o el clorito de sodio, por vía oral para aquellos pacientes que tienen la.sospecha del virus.
La EMI realizó una capacitación sobre el uso del dióxido de cloro, donde también presentó productos como gel para desinfectar ambientes y bloqueador con dióxido de cloro.
“Hemos conformado un programa de investigación sobre la producción del compuesto en el que participan profesionales, biólogos, médicos, químicos y bioquímicos no sólo de Bolivia. A través de Callisperis, tomamos contacto con profesionales de otros países para ver lo que puede hacer el dióxido de cloro”, puntualizó el rector.
Tomando en cuenta que existe una La Ley 1351 que regula la elaboración, comercialización, suministro y uso consentido de la solución de dióxido de cloro como prevención y tratamiento ante la pandemia del coronavirus, la misma fue promulgada por la ex presidenta de la Cámara de Senadores, Eva Copa y el presidente Luis Arce lo puso en vigencia el 2 de diciembre.
A su turno la doctora Callisperis afirmó que el dióxido de cloro no es tóxico y que su “efecto es más benéfico que maléfico”. “En un litro de agua 10 ml (mililitro) de dióxido de cloro, cinco en la mañana y cinco en la tarde, durante 21 días (para la prevención contra la Covid-19).
Asi mismo, insistió que la única forma de intoxicarse con el dióxido de cloro es inhalándolo y esa no es la forma de uso. Callisperis sugirió al Gobierno autorizar a la EMI como una entidad científica que regule y certifique la producción de empresas que deseen producir.