En Nueva Zelanda, se halló un tiburón de 1,80 metros de longitud que emite un brillo en la oscuridad. Después de una extensa revisión, la revista Fronteras de las Ciencias catalogó este descubrimiento como el “vertebrado luminoso más grande del mundo que se conoce hasta la fecha”.
Bajo el nombre de Dalatias licha, esta especie es capaz de producir un resplandor azul-verdoso por medio de reacciones bioquímicas que le ayuda a sobrevivir, porque de esta forma se protege de sus depredadores, se camufla y también caza a sus víctimas.
“La existencia de organismos luminosos en esta zona [donde fueron halladas las tres especies de tiburones] hace cada vez más obvio que el producir luz en la profundidad tiene un importante papel en la estructuración del enorme ecosistema de nuestro planeta”, dilucidó Jérôme Mallefet, líder del equipo de estudio.
Recientemente, el periódico español El Mundo publicó en un artículo sobre la importancia de estudios en zoología, pues contribuyen a un mejor entendimiento de los muchos misterios que esconden las profundidades marinas.