Alcaldía de La Paz puso en marcha la primera planta de tratamiento de residuos orgánicos que tendrá la capacidad de procesar 30 toneladas de los centros de abasto de El Tejar, Rodríguez y el Cementerio General. El desecho se convertirá en abono y será empleado por Emaverde.
Mariana Daza, Gerente del Subprograma Territorios Resilientes y Directora del proyecto “Basura Cero en Bolivia”, indicó que la planta hará el tratamiento de residuos orgánicos diarios a través de un método de compostaje con aireación forzada. Además, informó que se realizaron las pruebas físicas y químicas, y los dos estudios dieron buenos resultados.
“La planta debe entrar en operación, hacer el tratamiento de las 30 toneladas diarias y generar el compost”, afirmó Daza.
Esta infraestructura tendrá la capacidad de producir el 50% de los residuos que ingresen, porque de cada 30 toneladas de residuos orgánicos, la planta obtendrá 15 toneladas de compost o abono.
La Agencia Sueca de Desarrollo Internacional financió este proyecto y fue ejecutada por Swisscontact y Helvetas en el marco del proyecto “Basura cero en Bolivia”.
Esta planta está ubicada en el exrrelleno sanitario de Mallasa y la administración podrá utilizar el abono producido para el mantenimiento de jardines y otros espacios naturales.
La nueva planta de residuos tiene cinco espacios: recepción, mezcla, maduración, compostaje y cernido. La generación del compost demorará alrededor de tres meses, para mediados de junio se tendrán las primeras 15 toneladas de abono.
El proyecto “Basura cero” tiene previsto diseñar una segunda planta de tratamiento de residuos orgánicos en el relleno de Sak’a Churu, para realizar el tratamiento de otro porcentaje de residuos orgánicos que se genera en La Paz.
El proyecto “Basura cero en Bolivia” se ejecuta en los municipios de La Paz y Tarija, además en las poblaciones del Chaco: Camiri, Boyuibe, Lagunillas, Gutiérrez y Cuevo.