En la final de la Supercopa Femenina disputada en Mérida, España, las campeonas y subcampeonas tomaron cada una su medalla con la mano sin que nadie se la colgara del cuello, a diferencia de la Supercopa masculina donde Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), entregó los premios a los jugadores del Barcelona y del Real Madrid.
Este accionar no pasó desapercibido por el público asistente, quienes se encargaron de difundir estas imágenes por diferentes redes sociales, las mismas son calificadas de “machistas” y “vergonzosas”.
Por otro lado, la RFEF sacó un comunicado donde se justificó alegando que se trabajó de acuerdo al reglamento, las condiciones del estadio y el exceso del aforo institucional:
“De acuerdo con los protocolos de premiación de la RFEF, y teniendo en cuenta tanto el elevado número de representación institucional, así como las infraestructuras para el acceso al palco desde el césped del estadio, el departamento de Protocolo decidió activar la ceremonia de entrega en el palco de la misma manera que se lleva cabo en la Copa del Rey: entrega de la Copa a la capitana del equipo campeón y entrega de medallas al equipo vencedor en césped/vestuario”.
Sin embargo estas justificaciones no bastaron para Javier Tebas, Presidente de La Liga, quien de igual manera criticó lo sucedido y posteó en sus redes sociales: “Esto pasa cuando los tan repetidos Valores son de boquilla, bien queda cosméticos … y no se cree en ellos”.
Por otro lado, lo cierto es que con los equipos masculino hay ocasiones donde no se realiza la ceremonia de entrega de medallas, por ejemplo la final de la Copa del Rey del año pasado, con la victoria para el Betis, donde fueron los propios miembros del staff quienes se encargaron de repartirlas.