Este pasado 28 de enero, las autoridades chilenas han elevado a naranja el nivel de alerta por un incremento de la actividad del volcán Láscar, en la región de Antofagasta y han ampliado el perímetro de seguridad a 10 kilómetros.
Asimismo, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED) y el Servicio Nacional de Geología y Minería (SERNAGEOMIN), alertaron de la posibilidad de pulsos eruptivos con columnas que superaron los 5 kilómetros de altura, con proyección de bloqueos balísticos y dispersión de ceniza en el entorno.
Por otro lado, las autoridades han aumentado el perímetro de seguridad hasta los 10 kilómetros, lo que afecta fundamentalmente a actividades turísticas y de pastoreo.
Sin embargo, existe la necesidad de mantener una acción preventiva ante posibles efectos que pudiera generar un proceso superficial en el volcán.