Tradicional ceremonia de entierro del Pepino, que contó con la presencia del Alcalde Iván Arias, donde afirmó que la celebración fue un derroche de “alegría y esperanza” para la ciudadanía, en general “no ha habido violencia”.
El Alcalde pidió a la población que se “divierta con precaución y evitar muertes”. En el inicio de la entrada de ch’utas, el burgomaestre señaló que el “Pepino no quería entrar al ataúd”, pero toca enterrarlo para esperarlo de nuevo en 2024. Además, destacó el comportamiento ciudadano porque no se evidenció derroche de agua, sino de espuma y alegría.
Por su parte, Rodney Miranda, Secretario Municipal de Culturas y Turismo, destacó la organización del Carnaval que volvió con todas sus actividades después de dos años de ausencia debido a la pandemia del coronavirus.
“La organización ha mejorado desde el Corso Infantil, la Farándula carnavalera, el Jisk’a Anata, así que estamos contentos por ello, gracias a la población, a los organizadores, gracias a los funcionarios municipales el Carnaval se ha posicionado”, aseguró Miranda.
La entrada de ch’utas que se inició a mediodía de este domingo (26/Feb) tuvo la participación de más de una veintena de comparsas que mostraron su alegría y entusiasmo en la festividad.
Entre ellas se encuentran Ch’utas y pepinos “Legítimos ch’aska caballos y sus lindas rositas Uta Pokas de Viacha”, la comparsa de ch’utas y pepinos siempre corocoreños, Unión ch’utas alegres de Caquiaviri y Comparsa de ch’utas y pepinos socio cultural compadres T y G, entre otras.