Probable legalización de venta y consumo de cannabis podría convertir a México en el mayor mercado legal de marihuana e incluso crear un gran impacto en Estados Unidos.
Vicente Fox, Expresidente de México y defensor de la industria de cannabis, afirma que la aprobación de la ley empujará a Joe Biden, Presidente de Estados Unidos, a legalizar la marihuana en su territorio norteamericano.
La Cámara de Diputados de México aprobó el 10 de marzo un proyecto de ley sobre la legalización del alucinógeno que espera ser aprobado por el Senado y posteriormente en ley por Manuel López, Presidente mexicano.
La Corte Suprema de México le dio al Congreso una fecha límite para aprobar la legalización: 30 de abril.
Uruguay se convirtió en el país pionero, pues el 2014 legalizó la venta y producción del cannabis y el 2018 Canadá siguió sus pasos.
Existe una alta controversia sobre el tema en el país centroamericano, según una encuesta realizada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Publica (CESOP), la pregunta sobre si están o no de acuerdo con la legalización de la marihuana, con fines medicinales: 86.6% a favor y 12.8% en contra; con fines recreativos 25.2% a favor y 71.1% en contra; y con fines industriales 47.4% a favor y 44.8% en contra.
Fox afirma que, aprobada la ley, Estados Unidos quedará en medio de dos grandes productores, “si todo el mundo ya avanzó, Estados Unidos no se puede quedar atrás”.
El Expresidente pronostica que Estados Unidos, Canadá y México serían los próximos productores y exportadores para el resto del mundo bajo las reglas del tratado de libre comercio de América del Norte, provocando “un boom impresionante”.
Zara Snapp, Cofundadora del Instituto RIA, centro de investigación y activismo sobre las innovaciones en políticas de drogas, considera que la legalización podría derivar en “graves daños a la vida de las personas”.
Snapp plantea que no se elimina la posesión simple como delito y establece multas superiores de 500 dólares por portar más de 28 gramos y de más de 13.000 dólares para quien venda cannabis fuera de los establecimientos autorizados. Todo ello podría abrir la puerta a la corrupción y a los abusos de funcionarios administrativos o policiales.