Luego de dos años de ausencia debido al Covid-19, la popular entrada del Jisk’a Anata en La Paz regresó. Acompañada de medidas de bioseguridad y con la participación de 52 comparsas esta actividad carnavalera tuvo buen recibimiento por parte de la población paceña.

Danza de los Tinkus en el Jisk'a Anata. Foto: AMN

Iván Arias, Alcalde de La Paz, lideró el comienzo de esta actividad en compañía de conjuntos autóctonos y folklóricos. El trayecto del Jisk’a Anata fue desde la Avenida Montes hasta el Mercado Camacho.

“Bailemos con mucha alegría y que nuestro Jisk’a Anata vuelva a retomar el brillo que ha tenido otros años y esta vez con un recorrido mucho más completo”, manifestó Arias durante su recorrido.

Las Provincias paceñas levantaron su voz con la presencia de los Sicuris de Italaque, las tarqueadas, sicureadas y pinquilladas que alegraron a representantes diplomáticos que tomaban fotos y videos de las danzas.

Danzas tradicionales como los Waka Wakas, donde el K’usillo hizo de las suyas, arrancó más de un aplauso del público.