Corea del Norte presumió ser uno de los pocos países del mundo que dispone de armas nucleares y misiles avanzados, y el único que hace frente a Estados Unidos al “sacudir el mundo” con pruebas de misiles.
Una tensión internacional aumentó por la serie de pruebas de misiles balísticos de Corea del Norte, acciones prohibidas desde hace tiempo por el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El Departamento de Estado de EE.UU. repitió las declaraciones anteriores de que no tenía ninguna intención hostil hacia Corea del Norte e instó a retomar el diálogo, llamadas que Pyongyang ha ignorado persistentemente.
Jenny Town, Directora de 38 North, un programa sobre Corea del Norte con sede en Washington, dijo que el hecho de que la declaración de Corea del Norte procediera de su Ministerio de Asuntos Exteriores probablemente hizo que el comunicado fuera menos amenazador de lo que podría parecer. “La formulación es muy pasiva. No es que lo vayan a hacer, sino que pueden hacerlo”, agregó la directora.
Las conversaciones para persuadir a Pyongyang de que renuncie o limite su arsenal a cambio de un alivio de las sanciones están estancadas desde 2019.